Como se explicaba en la entrada anterior los bonos son un instrumento de renta fija, por lo tanto es posible saber cuanto deberían valer cada día. Y decimos cuando «deberían» porque una cosa es el valor teórico (lo que tendría que valer) y otra cosa distinta es cuanto vale efectivamente en pizarra, es decir, puede que el valor que le da el mercado al bono concuerde o no con el precio calculado desde la teoría.
A este valor teórico se lo denomina VALOR TÉCNICO, y esta dado por la sumatoria del capital que resta amortizar y del valor corrido de los intereses al día del calculo.
Desglosemos un poco esta idea. Cuando un inversor decide colocar su capital en un bono lo hace porque como contrapartida el emisor se compromete a devolverle ese dinero y además un interés mas adelante en el tiempo (este tiempo ya viene estipulado en el prospecto). Si quisiéramos venderle el derecho de cobrar el bono a otra persona el precio que deberíamos pedir en la teoría seria igual al dinero que pusimos y aun no nos devolvieron, es decir el capital adeudado, y un proporcional de los intereses hasta el día que hacemos el calculo. Se calcula el interés de esta manera ya que no es lo mismo comprar un bono si falta 1 día para cobrar el interés que si faltan 180, en la medida que nos acercamos a la fecha de pago del interés es lógico que ese valor pase al precio.
Grafiquemos la idea anterior con un ejemplo. Supongamos que usted realiza un plazo fijo en su banco de preferencia, invierte $1000 y dentro de 30 días el banco le devolverá $1300. Hasta ahí todo sencillo, 1000 pesos corresponden al capital y 300 al interés. Compliquemos un poco el ejemplo, imaginemos ahora que transcurrieron 10 días y usted necesita recuperar el dinero del plazo fijo antes, entonces le «vende» ese plazo fijo a un amigo (suponiendo que se pudiese hacer esta venta como con otros instrumentos financieros a través de un mercado secundario). En este caso su amigo debería pagarle el capital que invirtió (1000) y los intereses, pero no la totalidad de estos últimos, sino el proporcional de los días que transcurrieron, en este caso seria 300/30×10 =$100 por lo que el valor de ese instrumento desde la teoría seria $1100. Los $200 restantes seria, nuevamente desde la teoría, la ganancia que tendría el nuevo inversor por quedarse el plazo fijo hasta la fecha de fin.